lunes, 1 de febrero de 2010

Felices sueños

Hace días que mi corazón juega a un juego nuevo. Aprovecha cada segundo en blanco para soñar.  Se imagina durmiendo contigo, compartiendo el mismo colchón y el mismo calor. Sueña  con desearte felices sueños cada noche: con un beso y dos palabras. Dice que así es feliz, porque en su juego tú eres feliz por estar ahí: descansando cada noche junto a mí.

Una noche llegabas tarde a tu refugio pero eso no importaba, yo te esperaba… y cuando por fin llegaste y te acostaste, mi mano buscó tu corazón para acariciarlo y después rocé con la yema de mis dedos cada uno de tus lunares… son tan hermosos… te pregunté si mañana me lo contarías y me dijiste que sí mientras el dorso de tu mano recorría mis mejillas. Una sonrisa, un beso y dos palabras.

En su juego, mi corazón inventó una tarde para ti y para mí. Tenía ganas de acariciar tu espalda, así que nos sumergió en una bañera con olor a almendras dulces (tu olor) y me dejó jugar  con tu espalda apoyada en mí y mis piernas entrelazadas a ti. Si cierro los ojos, puedo ver de nuevo el agua traslúcida por la mezcla con el jabón, todavía puedo sentir el calor del agua en tu piel y en la mía…

Mi corazón dice que quiere que su juego se haga realidad y que, aunque sea duro  y le cueste algún que otro dolor, va a seguir luchando, para poder regalarte algún día todos estos sueños y otros que va a inventarse cada día, cada segundo en blanco… y en cada uno de ellos, al final, te deseará felices sueños: con un beso y esas dos palabras.

1 comentario:

  1. ''Sueña con desearte felices sueños cada noche: con un beso y dos palabras. Dice que así es feliz, porque en su juego tú eres feliz por estar ahí: descansando cada noche junto a mí.''


    Me-encanta.
    De verdad.

    ResponderEliminar