Vuelvo a repetir noches ya vividas, a despertarme varias veces en la oscuridad de mi habitación y ver mi despertador, que con sus números en verde me recuerdan que a penas han pasado dos horas desde la última vez que lo miré. Vuelvo a sumirme en la inconsciencia del sueño entre lágrimas que nacen de mi corazón, que me grita y no me deja pensar en otra cosa que no seas tú, en esto que siento y que me duele y a la vez me arropa.
¿Sabes? Siempre pensé saber lo que quería, pero ahora veo que en realidad lo único que sé es lo que no quiero. No quiero pasar un solo día sin hablar contigo, no quiero sentir ese pánico que me ahoga cuando dices que ese día te irás pronto, no quiero tener que esperar hasta el final de la noche para saber si podré tenerte a menos de 5 centímetros de mi... para saber si esa noche te podré besar.
No quiero ver una pareja en la mesa de al lado y pensar por qué no puedo estar así contigo, no quiero besos que no signifiquen nada, no quiero abrazos vacíos, no quiero acostumbrarme a vivir con este dolor y esta intriga y llegar a pensar que es normal porque no puede serlo...no puede serlo. No quiero que pienses que esto se me pasará, que en realidad no tiene importancia y que no te quiero tanto como pienso porque, en realidad, es todo lo contrario: te quiero más de lo que pienso.
No quiero vivir de esta manera, ocultándote todo esto que llevo dentro y que no sé si algún día podrás escuchar; no quiero fingir ante el mundo que no pasa nada en mi interior, que no sufro ni padezco por ti, que todo está bien y que cumplo con mis obligaciones sin esfuerzo. No quiero sentirme mal porque no quiero perderme mi vida, no quiero invertir mal mi tiempo.
No quiero que los días me parezcan lentos, no quiero que me apartes de ti, no quiero que decidas no volver a acordarte de mi (quizá ya lo has decidido...), no quiero no saber qué pasa por tu mente y por tu corazón... no sé si te merezco o no, probablemente no, pero lo que sí sé es que no quiero perderte.
Vuelvo a repetir noches ya vividas... y entre tanto dolor me imagino a solas contigo, bajo las estrellas otra vez, y todo está en silencio salvo mi corazón, que habla con el tuyo y le confiesa lo que siente, y por un momento puede compartir sus latidos con los tuyos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario